Scala Contarini del Bovolo, el tesoro escondido de Venecia

Scala Contarini del Bovolo (c) Shutterstock.com
Scala Contarini del Bovolo (c) Shutterstock.com
Icónica, hermosa y... imperfecta. Sin duda, esta es la característica que hace de la Scala Contarini del Bovolo una rara joya de la arquitectura veneciana.

Escondida en un laberinto de calli y canales, a pocos pasos de Campo Manin, el visitante encontrará una joya arquitectónica caracterizada por la combinación de elementos renacentistas, góticos y bizantinos. La Scala Contarini del Bovolo es un edificio histórico de belleza incomparable que también debe parte de su encanto a las intrigas que rodean su escalera homónima. Según las pruebas históricas, fue encargado por Pietro Contarini hacia finales de 1400; sin embargo, aún existe cierta incertidumbre sobre la verdadera identidad de su creador. La versión más creíble la atribuye a Giovanni Candi, indicado en los documentos históricos como «marangón», que significa carpintero y carpintero en oposición a un arquitecto. Esto explicaría las inconsistencias arquitectónicas del edificio, que son bastante evidentes cuando se sube la escalera.

Misterios aparte, los que no temen a las alturas pueden subir a la cima de esta escalera para ganado de 26 metros de largo, encerrada en un cilindro perforado como un encaje, para admirar un raro vistazo de la ciudad. Entre sus tejados se puede ver una de las características arquitectónicas típicas de Venecia: las «altane» (terrazas cubiertas de madera).

La logia del segundo piso de la Scala del Bovolo conduce a la Sala de Palacio Contarini, que alberga una exposición de pinturas, esculturas y objetos de artes aplicadas. La colección es modesta, pero ofrece a los visitantes una mirada en profundidad a los estilos de vida venecianos de los siglos XVI al XVIII.