¿Qué hay más tradicional que una góndola? La típica embarcación veneciana, delgada y larga, utilizada para cruzar los canales, es uno de los símbolos de la ciudad y tiene una larga e interesante historia que contar. Descubra todo lo que debe conocer sobre la góndola.
La góndola es el barco tradicional de Venecia: entre los siglos XV y XVI, en el período de mayor prosperidad económica de la Serenísima, los nobles solían adornar sus góndolas con mucha pompa. Fue el Senado el que impuso el negro a todos, en un intento de detener la competencia entre las familias.
Hasta hace unas décadas, el llamado «felze» estaba montado en el centro de la góndola, un techo con puertas y ventanas correderas y en invierno incluso más caliente. Protegía a los pasajeros de la humedad, el frío y… a los amantes de las miradas indiscretas. No hay más góndolas para uso privado y la última persona que tuvo una fue la famosa heredera Peggy Guggenheim.
Cada góndola tiene 11m de largo, 1.40m de ancho y 0.65m de alto y para su construcción se utilizan ocho tipos de madera: roble, abeto, olmo, cerezo, alerce, nogal, tilo y caoba. Las únicas partes metálicas son el «hierro» de la proa y el «risso» de la popa. Las góndolas tienen un fondo plano que les permite navegar fácilmente incluso en aguas muy poco profundas, y son asimétricas: el lado izquierdo es 24 cm más ancho que el derecho, y esto hace que siempre naveguen inclinadas hacia un lado, compensando el hecho de remar con un solo remo. El logo del uniforme del gondolero representa al león alado de San Marcos sosteniendo un libro, símbolo de paz y fuerza, rodeado por los dos tradicionales adornos de arco de la góndola.
Convertirse en gondolero hoy en día requiere un camino bastante complejo: hay que asistir a una escuela especial, pasar un concurso público organizado por la Autoridad de Gondolas y hacer un aprendizaje de 6 a 12 meses con un gondolero profesional, seguido de un examen práctico. Los gondoleros tradicionalmente siempre han sido hombres. La primera mujer que obtuvo la licencia fue Giorgia Boscolo en 2010, que así coronó su sueño de convertirse en gondolera como su padre.
La histórica tienda de Emilio Ceccato, fundada en 1902 a los pies del puente de Rialto, es el punto de referencia de la ropa de la categoría de los gondoleros de Venecia.
Entre los astilleros más antiguos (o «squeri»), el más notable es quizás el de Domenico Tramontin y Figli, establecido en 1884. Uno de los pocos squeri que aún funcionan en Venecia está situado en el distrito de Dorsoduro, cerca de San Trovaso, entre la Accademia y la Zattere. El edificio que alberga el Squero San Trovaso recuerda a un típico chalet de montaña porque los constructores de góndolas venían tradicionalmente de las montañas venecianas del Cadore. Una vez completado, la góndola se baja al agua a través de un tobogán.
