Turín es una ciudad con dos caras: una saboyana, tradicional y un poco cerrada, y otra subterránea e innovadora, donde lo clásico y lo contemporáneo coexisten y a menudo se fusionan. Construido en 1916 según un diseño de Matté Trucco para albergar la fábrica FIAT (más tarde FCA, ahora parte del grupo Stellantis), el complejo Lingotto todavía marca la vida de la ciudad.
La transformación arquitectónica de la ciudad en los años setenta sentó las bases de la evolución posterior: la de las nuevas infraestructuras vanguardistas construidas por los arquitectos màs famosos del tiempo con motivo de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2006, como el Palasport de Arata Isozaki y Pier Paolo Maggiora, el Oval de Hok Sport y el Studio Zoppini (que acoge cada año la exposición internacional de arte contemporáneo “Artissima”), la Palavela de Gaezaki y Pier Paolo Maggiora, el complejo del Lingotto de Arata Isozaki y Pier Paolo Maggiora. la Palavela de Gae Aulenti y Arnaldo De Bernardi, el mercado cubierto de Massimiliano Fuksas en la Piazza della Repubblica, el Centro Universitario de Humanidades de Norman Foster o la nueva estación de Porta Susa del Grupo Arep.
El complejo multifuncional del Lingotto, en el distrito de Nizza Mirafiori, es un símbolo del pasado industrial de Turín, reconvertido por el arquitecto Renzo Piano en la década de 1980. En el techo de la fábrica, donde solía estar la pista de pruebas de los coches, Renzo Piano diseñó una especie de «ataúd», una fascinante estructura suspendida. En el interior, la colección de obras de arte que perteneció a Giovanni Agnelli, el histórico presidente de FIAT, y a su esposa Marella, está permanentemente abierta al público. En la Pinacoteca Giovanni e Marella Agnelli se puede admirar una colección única en Italia de siete lienzos de Matisse, un cuadro de Balla de 1913 sobre el tema de la velocidad del automóvil, obras maestras de Severini, Modigliani y Tiepolo. Pero también Canaletto, Bellotto, Picasso, Renoir, Manet y Canova. La Pinacoteca alberga regularmente exposiciones temporales y una sala de consulta dedicada al tema del coleccionismo.
El concepto futurista del diseño de Piano se integra perfectamente en la estructura original de la antigua fábrica, que también fue innovadora para su época, estableciendo un interesante diálogo entre el paisaje urbano y el paisaje natural, con los Alpes silueteados en el horizonte. La pista de pruebas en el techo ofrece una vista impresionante de la ciudad y conduce a la llamativa «Bolla», un edificio de vidrio y acero en forma de burbuja con líneas futuristas.
Adyacentes al complejo se encuentran las antiguas fábricas de Carpano, ahora ocupadas por el gran mercado del sabor “Eataly” y, a poca distancia, el nuevo parque comercial verde de “Green Pea” (abierto a finales de 2020).
