Sirmione. Entre la historia, el deporte y la relajación

Rocca Scaligera Sirmione (c) Ekaterina Polischuk/Shuttesrtock.com
Rocca Scaligera Sirmione (c)
Sirmione, una encantadora ciudad situada en la parte baja del lago de Garda, recibe a los visitantes con un paisaje impresionante, restos históricos y prestigiosos balnearios.

Durante los siglos pasados un puesto militar, hoy Sirmione es uno de los destinos turísticos más populares de la zona. Al entrar en la ciudad, los visitantes son recibidos por el castillo de Scaliger, que guarda el único punto de acceso al casco antiguo por tierra. Es una de las fortalezas mejor conservadas de Italia y fue construida a mediados del siglo XIII por los Scaligeri, la dinastía que gobernaba Verona. Las murallas y las tres torres macizas se caracterizan por las almenas de cola de golondrina que distinguen a todas las construcciones de Scaliger. Subiendo una rampa de unos 146 escalones (¡pero vale la pena!) se accede a las pasarelas de la pared, hasta la cima de la torre más alta, donde se puede disfrutar de una magnífica vista del lago.

Otra visita ineludible es la de la Grotte di Catullo. No se deje engañar por el término “grotte» (la traducción italiana de “cueva»), que suele indicar una cavidad subterránea, porque en realidad se trata de los restos de una domus romana, construida entre finales del siglo I a.C. y el siglo I d.C. en la punta de la península de Sirmione. Este importante complejo arqueológico se considera el ejemplo más importante de villa romana del norte de Italia. La tradición identifica la villa como perteneciente a Valerio Catullo, pero no hay certeza de que el edificio sea realmente aquel en el que vivió el gran poeta latino. En cualquier caso, el lugar está inmerso en una atmósfera especialmente evocadora, gracias a la impresionante vista, a la vegetación mediterránea y a las tranquilas aguas del lago que lo rodean. Pero Sirmione es uno de los centros turísticos más importantes del lago de Garda también gracias a su encantador casco antiguo, lleno de restaurantes, bares, heladerías y tiendas donde comprar recuerdos, pero también gracias a sus instalaciones deportivas, donde se pueden practicar deportes acuáticos como el windsurf y la vela, aprovechando las ventosas aguas del lago.

Por último, si quiere contemplar la zona desde otra perspectiva, sólo tiene que reservar una excursión en barco, que le permitirá admirar la villa en la que vivió la cantante Maria Callas y el manantial de Boiola, del que mana un agua especialmente rica en azufre, para llegar a la encantadora isla de San Biagio, conocida como la Isla de los Conejos, un pequeño paraíso lacustre, caracterizado por sus verdes prados, cipreses, arbustos en flor y habitado por numerosos conejitos. Y después de haber explorado Sirmione a fondo, ¿por qué no relajarse completamente sumergiéndose en sus beneficiosas aguas termales? El balneario Aquaria, rodeado de un frondoso parque, ofrece, entre otras cosas, saunas, baños romanos, recorridos vasculares, sala de sal. Sumergido en las aguas termales de su piscina infinita con vistas al lago, especialmente con las luces del atardecer, es fácil encontrar el equilibrio y la armonía.